certificado green building

Los espacios físicos han cambiado radicalmente para satisfacer las nuevas demandas surgidas por el trabajo híbrido y el teletrabajo. Ante esta situación, es esencial que los edificios sean eficientes. Por ejemplo, la obtención de un certificado green building puede asegurar que el espacio sea eficiente, efectivo y atractivo. Un ejemplo de estos certificados son los estándares de Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental (LEED). 

Los LEED son un sistema de certificación de edificios ecológicos que se puede utilizar tanto para edificios nuevos como existentes. Gracias a su implementación las empresas pueden capitalizar sus nuevos espacios mediante el análisis y la optimización de los espacios verdes para el diseño, la construcción, operación y mantenimiento. 

Pese a que el proceso de certificación es complicado y engorroso, los resultados valen la pena. Ya que una certificación de construcción ecológica es una herramienta poderosa tanto para diseñadores como propietarios. A continuación, se desglosan detalladamente tres razones para considerar la inclusión de un certificado green building.

1. Reducción del impacto medioambiental

La nueva construcción es un emisor importante de gases de efecto invernadero, la actividad del sector representa el 40% de las emisiones mundiales. Además, se consumen cuantiosos recursos naturales durante el proceso de construcción. 

No obstante, los proyectos con un certificado green building utilizan menos recursos. Reduciendo así el impacto medioambiental debido a la utilización de protocolos de reciclaje, economía circular y otras iniciativas. Además, los proyectos con certificación LEED suelen ser más asequibles. Gracias a que reducen la cantidad de carbono, agua, energía y desechos necesarios para construir y mantener el espacio de trabajo físico.

Al mismo tiempo, los edificios certificados proporcionan un ambiente interior más limpio, mejorando la salud de los trabajadores, aumentando la productividad y minimizando las bajas por enfermedad. 

En resumen, los edificios ecológicos son menos exigentes con el entorno exterior y producen experiencias interiores más saludables.

2. Aumento del valor de la propiedad

La certificación mejora la imagen de la propiedad haciéndola más atractiva y facilitando el éxito de las inversiones inmobiliarias.

Los edificios ecológicos se perciben positivamente en el mercado actual, esto supone tarifas de arrendamiento más altas. Según un estudio, las propiedades con certificación LEED obtuvieron alquileres un 11% más altos que sus contrapartes sin certificación. Si esto se se combina con el potencial ahorro de costes, la certificación puede ser una inversión que maximiza el valor en todos los ámbitos.

Con la creciente demanda de oficinas ecológicas, las empresas emplean la certificación para crear instalaciones que respalden a sus equipos y la sostenibilidad a largo plazo.

3. Menores costes de operación y mantenimiento

Un edificio certificado tiene menores costes de mantenimiento que un edificio tradicional, gracias a la eficiencia energética. Los materiales utilizados en los edificios LEED reducen los consumos y minimizan el coste total operativo de construcción.

Los edificios con certificación LEED acumulan ahorros de energía, mantenimiento, agua y desechos. Esto supone que los gastos operativos de los edificios con certificación LEED son un 7,5% más económicos por metro cuadrado. Un ahorro significativo y una gran muestra del ahorro de costes a largo plazo asociado con la certificación LEED.

No obstante, la reducción real de los costes de mantenimiento depende de la implementación efectiva de la certificación LEED. Pese a ello, solamente la ventaja financiera ya justifica establecer la obtención de la certificación como una prioridad.

¿Cómo empezar?

La implementación tardía de certificaciones rara vez da resultados. Por lo tanto, es recomendable realizar un estudio previo de los requisitos y registrar su proyecto con la agencia supervisora, en el caso de LEED, el Consejo de Construcción Ecológica de EE. UU.

Existen cuatro niveles diferentes de certificación LEED. Desde el certificado más simple hasta una designación integral “Platino” para los edificios ecológicos más sostenibles. Por ello, es importante comprender adecuadamente estos niveles y elegir el más alcanzable y apropiado para cada edificio en el momento inicial del proceso. Si se compra una propiedad, el nivel de certificación puede aportar una idea de las estrategias ecológicas empleadas. Junto a ello, otros datos, como la puntuación Energy Star de un edificio, proporcionan información operativa real sobre el rendimiento del edificio en comparación con otros similares.

En general, es esencial desarrollar un plan que incluya estrategias específicas para obtener la certificación. Entre las más utilizadas destacan la utilización de materiales sostenibles, la reducción del consumo de energía y agua, y la promoción de ambientes interiores saludables. El equipo tiene que conocer que los objetivos de sostenibilidad son tan importantes como otros requisitos del proyecto.

Desafios

Para el mantenimiento de la certificación LEED existen una serie de requisitos continuos y permanentes. Principalmente se deben emitir informes sobre el consumo de agua y energía de los edificios. Pero en algunos casos, también se debe informar de manera continua de los datos a los servicios públicos.

Además, los inquilinos probablemente esperarán una continuación de las prácticas operativas sostenibles (limpieza ecológica, monitoreo de IAQ), por lo que también es importante mantener dichas prácticas desde la administración de propiedades.

En conclusión, las empresas quieren crear edificios rentables y saludables que duren mucho tiempo. La implementación de certificados green building de terceros proporciona una validación adicional que aporta credibilidad respecto a la correcta implementación de acciones sostenibles.